sábado, 17 de julio de 2010

Permanecer

Presiento que se me irá de las manos, como lo hacen todas las cosas que llegan a importarme. La decisión de permanecer o salir corriendo, he aquí un nuevo riesgo. No sirvo mucho para esto, no por mucho tiempo. Tengo una inevitable aspiración interna, sólo una, pero muy importante, y está casi claro que no está contemplado.

A veces sólo deciden las circunstancias...

Sigue siendo como respirar un perfume prohibido o consumir un producto único que finalmente te hiera o te mate. Normalmente es así como acaban las historias. Pero lo hago, por lo fascinante que me resulta el momento y me resultan las personas. La aventura de mi vida: descubrir a otros; la única forma de descubrirme yo misma.

Hay un claro protagonista, ese es básicamente el problema. Tan difícil como fascinar a alguien fascinado... lo fácil sería envolverse en un mundo embriagador y dejarse llevar hasta sangrar mientras consumes la risa y parte de felicidad que nos resulta gratuita en ese trato. Pero no sólo me interesa el deseo, por mucho que me desborde.

Voy a tener que empezar a plantearme seriamente qué pasa conmigo, este sentimiento bucle de las almas que no me tocan o no quieren tocarme, ya no sé si es cosa de la mente. No voy a dudar de mis virtudes ahora mismo, por respeto a la gente que un día llegó a amarme. ¿Por qué no existe la reciprocidad? Tan simple como que una pantera NO es negra, lo que pasa es que camina de noche, pero sí sale de día (hay fotos!!). Puedes verla, es como leopardo oscuro, tiene manchas, igual que los demás pero diferente. No es tan complejo...

Sí, soy la pantera en eterna espera, una fiera, pero cansada. Y logro encontrar motivación en lo diferente, volverme loca. Y no por eso significa que no crea en mí, pero me reafirmo, y soy felíz compartiendo, y en muchas ocasiones prefiero la felicidad ajena a la mía para construir esta última.

Hoy he soñado, y me acuerdo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario