martes, 30 de abril de 2019

Se va, porque lo has perdido

En el momento en que el vértigo de la pérdida te desborde, en vez de dejarte llevar por el desasosiego y la extrañeza, piensa un momento si no has sido tú el que ha dicho adiós, en todas tus frases, por todos los medios. Si el final no comenzó un día de septiembre y lo demás sólo ha sido una larga despedida, sin manos tendidas, sin ternura, sin amor.

No te sorprendas entonces.