jueves, 28 de octubre de 2010

No corras con una bestia detrás

Sólo vemos de verdad a alguien cuando somos conscientes de su fragilidad, de su fortaleza, y asímismo nos desnudamos nosotros, de la misma forma en que lo hace él o ella. Seguro que la memoria abarca este tipo de desnudo como uno de los que más nos enloquecen. No todo el mundo se despoja tan pronto de sus armas o sus escudos, pero suele haber siempre un momento en que se entreabre la puerta que muestra sus tesoros más internos.

Yo estoy aquí, soy todo lo que tengo. No voy a seguir corriendo, sólo quiero estar... sólo quiero permanecer... contigo.

Sí, la bestia es evidentemente el miedo, pero pesa, y estoy algo cansada. Es más fácil decir te quiero, abrazar y besar... si tan sólo me apetece hacerlo.


Baila baila... por si acaso llegase el ocaso.

miércoles, 13 de octubre de 2010

Lo que no nos pertenece

Hay que saber pedir perdón y saber dar las gracias... pero también hay que saber decir basta. Son las historias de las almas que no nos tocan y que no quieren ser tocadas, paredes contra las que chocamos una y mil veces sólo por ilusa obsesión de que al final lograremos traspasarlas pero... la realidad es bien distinta.

Me salvan mis amigos, mis buenos amigos, la gente que me quiere a su lado, los que de verdad están, los que quieren escucharme, los que quieren bailar, los que quieren viajar, los que de verdad quieren crecer junto a mí...

Tengo muchas personas en el corazón, que no estén aquí no significa que no los ame, que no esté junto a ellos no significa que los olvide.

Yo no sé olvidar.

jueves, 7 de octubre de 2010

Daño

Tan absurdo como una discusión absurda que ni empiezas ni provocas, tan desmoralizante como una cita médica que no pides, de la que te enteras al llegar a casa, importante, además, que te coincida con el trabajo, y a la que de todas todas no podrás asistir. Cuando la gente me pregunte qué hago por la mañana responderé: dormir para no ser consciente de mi realidad actual, ¿algo más?. Existe demasiada asepsia en general, y sólo se libra un sector de un cúmulo de 'dinámicas que no me identifican'.

Hay algo dañado en todo esto...

sábado, 2 de octubre de 2010

Una buena vida

¿Cuales son los ingredientes para vivir bien? Está claro que cada uno tiene los suyos, esos pilares que sostienen el ánimo y te hacen sentir que algo de esto tiene sentido, levantarte felíz por la mañana apenas sin reparar en su sentido, sonreir porque sí... Pero todos buscamos algo mejor, a pesar de tener gente, tener salud, tener trabajo. Lo fácil no nos gusta pero aspiramos a ello, lo difícil nos desagrada pero estamos acostumbrados. La esencia de las cosas tiene unos límites poco definidos.

Quiero apartarme de este sentimiento de "no estoy mal pero podría estar mejor", "soy felíz pero podría serlo mucho más". El desencanto lo mató todo cierto día...

Desde el 28 de febrero he tratado de cambiar las cosas, girar un poco, y lo he hecho, pero necesito completar la vuelta, adquirir compromisos, sentirme propiamente yo. Sigo en transición a pesar de la cordura, la sensación de fortaleza viene como tan pronto se va.

No me gusta la gente miserable, ni las malas intenciones, los problemas que no busco ni las tristezas gratuitas. Querría respirar el aire limpio de otra parte, donde no tenga que pensar en lo que tengo y no, ser una extranjera en tierra ajena donde lo malo y lo bueno de igual porque el tiempo de visita es escaso. Quiero sonrisas y el ímpetu por hacer mil cosas, llorar con una peli o mirar la luna junto a alguien. Quiero que me cuenten historias curiosas sentada en un bar y que mi mente vuele pensando en todo lo que me queda por hacer y podré hacer algún día.


Esta semana buscaré otro trabajo, no demasiado bueno como para apartarme de mis sueños, pero sí algo mejor. Algo que no demande demasiada responsabilidad pero que me de más ingresos...

No me he matriculado en nada este curso... como ya se deduce.