domingo, 13 de febrero de 2011

Aurora VS las supersolteras y su día de calabazas

Sí, durante algún tiempo pudo leerse en mi nick LashSleeping Beauty, porque lo único que hacía era esperar, prácticamente dormida (cosa que no dista mucho de la mayoría de cosas que sigo haciendo).

Suena siempre tan poético... y tan patético, y tan utópico... y asumir que somos el producto femenino de la contemporaneidad. Tipos de mujeres, estados que son consecuencia del devenir de nuestras 'x' vidas y bueno... quizá hubo un tiempo en que las supersolteras eran como Aurora, y creían que sus sueños podían cumplirse, y que el sacrificio merecía la pena, que un hombre era la salvación y la cura a todos sus miedos y que jamás serían tan felices de otra manera. Pudieron perder la noción de cuando olvidaron todo eso y empezaron a mirar sólo por sí mismas, al amparo de sus propios sueños, de sus motivaciones, mezclándose con príncipes de medianoche (o mediamañana) lo justo para no impregnarse de nada emocional. Siendo felices, sin nada más.

Quizá algunas otras temieron desde mucho antes y optaron directamente por bailar y saltar sin vergüenza, no deseando ser princesa nunca jamás.

Otras somos Aurora, aunque duela reconocerlo. Tengo motivos suficientes para haber sido una supersoltera, y creo que en ninguna época lo fui. Suelo saltar y bailar a ratos mientras duermo por dentro o espero. Mi argumento es que nada de lo que te pase tiene que estropear el resto de tu vida, ni estropear la vida de ningún ajeno. Ni privar de lo mejor de tí a alguien nuevo. Odio cuando descubro que llego tarde a la vida de alguien, que no es un buen momento, que si hubiese sido hace años... Ver que cuanto más tiempo pasa más destruída está la gente, con su pobre corazón en ruinas escondido en el último rincón de su existencia, huyendo en ti de sí mismos.

Tengo unas cuantas ruinas, unos cuantos miedos y unas cuantas fantasías estúpidas, por no decir bastantes... pero veo triste esconderme y por eso no lo hago. Más bien me tomo las cosas como un "sabías a lo que venías", es lo que tiene esto. Vamos a perder muchas veces, hay que hacerse a la idea. Ganar aquí es siempre lo más difícil. Pero veo más victorias en el camino, por eso no estoy mirando el final.

Otra cosa es que uno mismo no quiera complicarse. Son lícitos los juegos entre supersolteros, pero ¿qué pasa si coqueteas con alguna Bella Durmiente?

Estoy contenta con mi mundo tonto. Me gusta que me gusten los disfraces y pensar que puedo llenar de fantasía la vida de cualquier persona. Me gustaría pensar que soy la razón por la que sonríes cuando te despiertas, como también a mí me pasa. Me visto seria para las cosas serias, por eso cuando me desnudo voy de gala; porque si logras desnudarme es que estás cerca de mi alma. Yo no tengo príncipes de medianoche ni mediamañana. Quiero vivir en paz con las cosas más sencillas, con alguna dosis eventual de caprichos curiosos.

Hay momentos en los que dejo de creer en el mundo, y siento que no encajo, y tan sólo me dejo llevar porque intuyo que cualquier lucha es inútil. Me digo a mí misma: ya pensaré mañana. Y mañana es hoy.

Se me da mal hacer las cosas 'bien'. Ese bien que te sirve de paracaídas justo antes de pegártela y que luego agradecerías pero no está. Me cuesta poco suicidar mis planes de orden y coherencia cuando lo único que me apetece es hacer lo contrario, y... quedarme durmiendo junto a tí y no acordarme muy bien de lo que dije, pero sí de algunas cosas.



Mañana es 'el día ese del amor' (como escuché hace poco). Yo ya hice mi declaración y mi regalo hace una semana (para que no se notase, claro). Creo que recibí calabazas emocionales virtuales, pero no estoy segura. Igual hasta que no vea una calabaza en mis manos no me hago a la idea. Realmente sería un gran regalo: una pedazo de calabaza enorme con una etiquetita cursi, que en vez de poner "Te quiero" (que no es algo tan malo, porque querer se quiere hasta a un perro, y muchísimo, pero claro, si uno se imagina diciéndolo puede sentirse ridículo, o no sentirse, y trata mejor de elegir otro tipo de verbo para no pillarse los dedos en un futuro, así que...) pondría: "Te aprecio". Es entonces cuando cualquiera podría echarse a llorar desconsoladamente. Podría imaginarme perfectamente con mi calabaza y su etiqueta tipo premio de consolación y mi media sonrisa nerviosa.

Mañana es sin duda un día para quedarse en casa.

No hay comentarios:

Publicar un comentario