domingo, 23 de mayo de 2010

Fugaz

Moverse en círculos es humano, pero esta vez será para dar mejor los pasos. Este 23 no es un funeral aunque reviva la efeméride del fracaso. Más bien es un "esta vez sí", "esta vez lo haré bien". Y no tendré que renunciar a nada ni esperar a nadie para ser felíz.

Ordenando, esta mañana me he dado cuenta de que nunca he tenido una "caja" para mí. Tengo cajas de recuerdos que he compartido con otras personas pero nunca la mía propia, de mi vida en soledad, mis viajes, mis conciertos, mis entradas de cine, mis tesoros... nunca. No he valorado jamás los periodos transitorios en los que permanezco a la deriva de los acontecimientos, y quizá ya sea hora.

Madurar es saber perder; es saber ganar. Asumir con valentía nuestra debilidad, conformando así nuestra fortaleza. No quiero ser nunca la viejecita que hable de su pasado como el único tiempo glorioso, sino vivir cada día con ilusión, pues la vida evoluciona siendo parte de un tiempo único, con lo bueno y lo malo que todos tienen.

El futuro nos da esperanza, pero este ha sido el mayo más fugaz de la historia.