Supongo que es este sentimiento el que en la mayoría de casos nos condena a ser infelices. Todo por "un poco más". Nunca he creído en teorías conformistas, como hace mucho tiempo expuse, pero, ¿no es también posible vivir la felicidad en un presente que no demande más de lo que éste mismo posee?. A veces siento mi vida muy buena, muy cómoda, bastante felíz, como cuando me miro en el espejo y no me comparo con nadie: soy simplemente perfecta. Así es como logro contemplar mi realidad en ocasiones, cuando no la comparo con antes ni con lo que podrá ser después, simplemente la acepto y valoro como se merece.
No se necesita amar especialmente a nadie, pero sí se necesita amar especialmente aquello que se tiene. Dejar atrás lo perdido es otro factor clave, por lo menos, desligarse de su carga mental, o como quiera llamarse.
No comprendo muy bien las dinámicas de todas las personas que integran mi mundo, pero no importa, tengo tiempo. Sigo en movimiento, no a pasos agigantados pero tampoco parada y, dentro de muy poco, estoy convencida de que el movimiento volverá a producirse con algo más de intensidad.
Una serie en dos días. Death note.
Dorian en la mesilla, junto a Lisbeth en su tercera entrega...
Prohibidas las listas de cosas que se emprenden y no se acaban. ¿Ambición? Sólo por aquello que estamos seguros de alcanzar.